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Antes de comenzar de lleno con el tema, queremos hacer un breve apunte.
Hace unas semanas se celebró el Campeonato del mundo de natación para deportistas con discapacidad. Nuestra selección se llevó 28 medallas en varias disciplinas y con nadadores/as con distintitos tipos de discapacidad.
¿Vas a la piscina? ¿Conoces sus beneficios? ¿Crees que es un deporte para que lo practiquen personas con cualquier tipo de discapacidad?
Existen muchas razones para ir a la piscina, a un lago o al mar este verano: para hacer más soportable el calor, para pasar un rato agradable, para ejercitar nuestros músculos, etc. Pero sobre todo porque la natación es uno de los ejercicios más completos para mejorar nuestra salud física… y mental.
¿Sabías que la natación promueve la liberación de sustancias en el cerebro que mejoran la cognición y la memoria? Debido a que contribuye a establecer nuevas conexiones cerebrales. Además ayuda a nuestro organismo a reducir los niveles de estrés y mejora nuestro sistema inmunitario. En general, mejora el estado de ánimo.
La natación produce la liberación de endorfinas, sustancias que reducen la percepción del dolor, nos proporcionan placer y una inmensa sensación de bienestar y felicidad. Una buena razón por la que la natación sea tan adictiva, ya que las endorfinas realizan funciones como la sedación, la reducción del dolor o la euforia.
Otro motivo es el estado de relajación que genera el agua. Por un lado, el medio líquido produce relajación, además el movimiento rítmico de la natación nos hace entrar en un estado meditativo. A esto se une que en el agua podemos desconectar de los sonidos que nos rodean y centrarnos solo nuestra respiración.
Más beneficios de la natación:
– Reduce la tensión emocional, puesto que reduce los niveles de cortisol, la hormona del estrés.
– Aumenta la producción de serotonina, una de las hormonas que nos ayuda a combatir la ansiedad, la depresión y el estrés.
– Las fibras nerviosas del cuerpo calloso –el cableado cerebral que permite la comunicación entre los dos hemisferios– se desarrollan más en los nadadores gracias a la precisión de las brazadas y a la forma en que se utilizan los movimientos bilaterales cruzados para nadar.
– Además pone en funcionamiento ambos hemisferios, que necesitan mayor cantidad de oxígeno. Este aumento de la comunicación de los dos lados del cerebro supone un aumento de la cognición y mejores capacidades de aprendizaje.
Incluso, según estudios con ratones obesos, suprime el deterioro cognitivo. En consecuencia, rescata del deterioro de la capacidad de aprendizaje y memoria a los ratones obesos, reduciendo la obesidad, disminuyendo la inflamación del hipocampo.
En cuanto a los beneficios físicos de la natación son innegables. Es un ejercicio muy completo que pone en marcha a los principales grupos musculares del cuerpo. Además de estimular el sistema cardiovascular, el trabajo realizado resulta mucho mayor que en otras actividades, gracias a la resistencia del agua. Otra ventaja es que el cuerpo, al estar sumergido, recibe menos impacto físico, y resulta más fácil moverse. Como buen ejercicio aeróbico –aquel que requiere un esfuerzo del corazón y los pulmones para proporcionar oxígeno a los músculos–, ayudará a mejorar las capacidades cardiorespiratorias y a incrementar la resistencia física al movimiento.
Para realizarlo, resulta fundamental el conocimiento de una técnica adecuada y una base de capacidad pulmonar estándar, pero se tratan de objetivos alcanzables por buena parte de la población con o sin discapacidad en diferentes etapas de la vida. Por todos estos motivos, se considera una de las actividades más completas y beneficiosas, junto con las necesidades de cada individuo, para mantener y mejorar un buen estado de salud física.
En el caso de las personas con discapacidad física, resulta todavía más beneficioso ya que puede ayudarles a controlar, mantener y mejorar su fuerza y movilidad. Estos factores son fundamentales en su caso, con la ventaja de que resulta más sencillo realizar esta actividad sin la necesidad de adaptaciones extra más allá de las necesarias para el acceso. Además, el medio acuoso permite la adaptabilidad de los movimientos y una mayor estabilidad corporal.
Así es la natación paralímpica
Este deporte es apto en su práctica para la mayoría de las personas, y hay varias categorías para aquellas personas que compiten con discapacidad, según el tipo de discapacidad, el nivel o miembros de afectación y/o movilidad. Categorias
Nota:
- Para los nadadores: seguro que no había pensado en todo lo que esta actividad le aporta. Así que a partir de ahora, tras el subidón que viene después de nadar o la adicción por la piscina, piensa en todo lo que está ocurriendo en tu cerebro tras practicar natación.
- Para los no nadadores, si necesitas una excusa para saltar a la piscina este verano o empezar su práctica en cuanto acabe…. ¿a que esperas?
