¿Sabíais que el queso protagoniza una de las fiestas populares más antiguas de la Península Ibérica y, por añadidura, de La Rioja?
Cada 6 de agosto cae sobre los habitantes de la localidad de Quel una lluvia muy curiosa. En concreto, 2.500 bollos de pan y 50 kilos de queso se lanzan desde el balcón de la Ermita de la Santa Cruz.
Declarada Fiesta de Interés Turístico Regional por el Gobierno de La Rioja en 2004 y de Interés Turístico Nacional, en 2015, por el Ministerio de Industria, Energía y Turismo.
Historia
El origen de las Fiestas del Pan y Queso de Quel se remonta a 1479, cuando la población de la Villa de Quel quedó mermada por una epidemia de peste a la que solo sobrevivieron 17 de sus 50 habitantes.
Para pedir perdón por sus pecados y acabar con la epidemia, los supervivientes salieron en procesión desde la Iglesia Mayor de la localidad hasta la ermita. Con ellos llevaron trece candelas, iguales en tamaño, en honor a once santos de la zona, a la Virgen María (representada en Quel por la Virgen de la Antigua) y al Santo Cristo.
Las velas fueron consumiéndose pero aquellas consagradas a la Virgen y a Jesucristo resistieron más que las demás. Tras la celebración de la procesión, la mortandad por peste cesó y los vecinos atribuyeron este hecho a un milagro divino. En agradecimiento, decidieron fundar una Cofradía y Hermandad de la Transfiguración del Señor, (conocida popular mente como Del Pan y Queso) con trece miembros, uno por candela, y acordaron mantener la tradición de la procesión, en la que se sacaría a la Virgen de la Antigua.
La procesión culminaría en la ermita de la Santa Cruz con un almuerzo de pan, queso y vino ofrecido por la cofradía para todos los vecinos y lanzado desde la balconada. De todo ello se da constancia en la Carta Fundacional y las actas originales guardadas por la Cofradía de la Transfiguración del Señor, que datan de agosto de 1479.