La Historia es injusta. La posteridad intenta no serlo, pero, ¿podemos estar seguros de que ésta no crea nuevas injusticias? La vida de Alan Turing es, en cualquier caso, un ejemplo de la represión de un genio, incluso después de haberle hecho un gran servicio a su país, Inglaterra, y a todos aquellos que estaban siendo atropellados o amenazados por la barbarie nazi. Turing es uno de los inventores del ordenador, gracias a su “máquina” que, desde 1940, efectuaba cálculos imposibles para la inteligencia humana. Al mismo tiempo es uno de los héroes de la lucha contra el enemigo, ya que supo frustrar las estrategias de cifrado de la marina alemana. Vitoreado por las autoridades – Churchill, la reina de Inglaterra-, cambió progresivamente su estatus de héroe por el de réprobo. Era homosexual, y según la ley inglesa de la época la homosexualidad era un crimen.

Lugar: Teatro Bretón de los Herreros